La acción moral
Los seres humanos a diferencia de los animales, somos inevitablemente morales porque en el momento de actuar sentimos la necesidad de reflexionar sobre nuestros actos y comportamientos: nos vemos obligados a elegir entre diferentes posibilidades, a cuestionar nuestras decisiones y a explicar los motivos que nos llevaron a elegirlas. Esta capacidad para reflexionar sobre nuestros actos y para dar razones sobre por qué actuamos de la forma en que lo hacemos en cada momento determinado recibe el nombre de moral.
Imaginar posibilidades, tener que elegir entre ellas y justificar dicha elección, son tres momentos de la estructura moral de las personas que hacen que ningún ser humano sea amoral.
Un ser es amoral, cuando carece de la capacidad para pensar y reflexionar sobre sus actos, es decir, cuando actúa automáticamente sin ser dueño ni responsable de sus acciones.
Sin embargo, es cierto que las personas podemos comportarnos moral o inmoralmente en relación con las normas de conducta que establece nuestra sociedad, lo que nos lleva a asumir las consecuencias que se derivan de nuestras acciones. El tema de la moral ha sido estudiado por diferentes filósofos que, en este ámbito, se han ocupado de ideas como el carácter moral, la conciencia moral, la felicidad, la justicia, los valores, la ciudadanía...
El carácter moral es la manera en la que nos comportamos habitualmente cuando estamos con otras personas. Este carácter es el resultado de un proceso de crecimiento en el cual la persona se puede reconocer a sí misma como el autor de todas sus acciones, y responder de manera justificada por cada una de ellas.
Gracias a la interacción cotidiana con los demás, y a la educación que recibimos, nuestro comportamiento se fortalece y mejora nuestra capacidad para actuar de manera autónoma, asumir responsabilidades, explicar nuestro comportamiento, respetar las normas de nuestra comunidad y exigir a los demás respeto por dichos principios sociales. Es necesario ejercitar estas capacidades y adquirir hábitos que nos permitan una buena convivencia y que nos ayuden a actuar y vivir en comunidad.
La conciencia moral
Es la capacidad de orientar nuestro comportamiento en concordancia con las normas sociales establecidas, de aceptarlas como propias, interiorizarlas y reconocerlas como válidas. Al asumir los parámetros sociales, nos comprometemos a respetarlos y, al mismo tiempo, somos reconocidos como parte activa de una comunidad.
Esta conciencia moral es una construcción social, pues los seres humanos no nacen con un comportamiento determinado genéticamente. Aunque tengan diferentes capacidades y potencialidades, deben elaborar constantemente los principios que regularan su acción, pues requieren de la colaboración constante de las otras personas que conforman la comunidad.
De esta forma, la moral humana elabora un sistema de normas sociales que son aceptadas por todos los miembros de una comunidad, sistema al que se someten porque lo consideran justificado racionalmente, y con el cual se comprometen de manera recíproca durante toda la vida.
Ahora bien, lo que hace que estas normas sean morales es que diseñan tanto los comportamientos que serán aceptados en comunidad como aquellos que no.
Tomado del libro Pensamiento Filosófico 2, Editorial Santillana.
Trabajo de clase.
Sobre el tema "La acción moral" realizar un mapa conceptual en Canva o en la aplicación que desee. Este trabajo debe subirse a Edmodo hasta el día 05 de febrero de 2021.
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